No sabemos si habrá un mañana, pero un hoy, eso es seguro.

Un tulipán no trata de impresionar a nadie. No se esfuerza en ser diferente de una rosa. No tiene que hacerlo. Es diferente. Y hay sitio en el jardín para cada una de las flores.

Este fin de semana de mayo se celebró Maria Auxiliadora, quizás mi relación en el pasado con el mundo salesiano y con la Fe en ella fueron la semilla que internamente fueron creciendo en mi interior para después de 21 años dedicar parte de mi vida y experiencia en ayudar y demostrar a los demás que siempre hay vida, siempre hay fuerza y siempre hay constancia, es sólo que muchas veces puede ser díficil encontrarlas sin una luz en la que orientarse.

Por eso y con mi humilde labor y experiencia os dejo un poco de luz para que quizás creas que, no hoy o mañana, te puedan ser de utilidad pero siempre sabrás que al menos en este blog un poco de luz siempre encontrarás y de ti dependerá dejarte iluminar o no.

Como dije en el título no sabemos si habrá un mañana, pero un hoy, eso es seguro y es algo que aprendí hace ya casi 22 años cuando estaba en el hospital y cuando no sabía si habría un mañana y el hoy era lo único de lo que disponía seguro para vivir y luchar un día mas.

Seguramente dispones de talentos inigualados que te aseguro todavía no has desarrollado completamente o no has sido consciente de ello. Y si ya estás siendo consciente de esto no tengas miedo a llevarlos a cabo por temor a ofender a otros que se sientan inseguros cuando están cerca de ti porque tú puedes ser la luz que los ilumine y les de la fuerza que necesiten.

Muchos de los grandes errores que cometemos en nuestra vida son muchas veces producto de nuestra impaciencia y de los que debemos aprender.

Otros errores vienen de actuar sin pensar, de no tener la información correcta o no querer escucharla de la experiencia de los que ya la sufrieron, de no entender el mundo tal y como es y que las cosas que nos suceden por buenas o malas no deben suponer un freno en el avance de nuestras vidas.

Nuestro primer deber realmente es ver la vida, el mundo y las personas tal y como son. Ver la realidad, hablar y perdonar.

La vida es relativamente simple o fustrantemente complicada, dependiendo de como decidas verla.

De ti depende como quieres vivir, mirando hacia atrás con añoranza y evitándote avanzar, o levantar la cabeza, aprovechar el día de hoy para avanzar con el apoyo de los recuerdos pasados sin que te que supongan una carga y tener claro que quizás no tengas un mañana pero lo que sí tienes es un hoy, un hoy por el que vivir, un hoy por el que luchar y un hoy por hacer feliz a los que tienes más cerca y a los que importas.

Quizás mañana no estés pero lo que hagas hoy seguramente sea lo que viva por ti el resto de muchos días en otras personas que necesitan y han necesitado de tu experiencia para ver que la vida por dura que pueda ser, uno siempre debe demostrarle que puede serlo más.

Porque amigos, Nunca es demasiado tarde para ser la persona que podrías haber sido.

Un saludo amigos.
Raul Martinez

Verano, fiesta y juventud. No dejes que la inmadurez y juventud cambie tu vida.

Comienza a manifestarse la madurez cuando sentimos que nuestra preocupación es mayor por los demás que por nosotros mismos.

En cada periodo estival, o fiesta o vacaciones, del calorcito, de la alegría, de los largos y soleados días y quería aprovechar esta entrada para recordaros que sólo un segundo basta en convertir la alegría y expectativas vacacionales de verano en una constante lucha por tu vida.

Con la fiesta se despiertan las ganas de los mas jóvenes y no tanto ya, de explotar su vida y disfrutar el momento a tope creyéndose invencibles. Yo les digo que no han de perder de vista a esos deseos de desenfreno, pero que presten atención a su responsabilidad, su cabeza, su moralidad, ya que un momento puede cambiar tu vida y la de tu familia y seres más cercanos.

Disfrutar Sí, pero con cabeza porque ese mismo segundo que la vida te puede proporcionar para esa felicidad inmediata también te la puede arruinar.

Se tú mismo, compórtate como tú mismo, vive como tú mismo, pero jamás hagas y y te comportes como los demás quieran o te hagan ver.

Tu madurez, tu fuerza mental, y tu saber decir NO a tiempo es lo que te puede cambiar el futuro.
Quizás tu destino pueda estar escrito, o quizás esté por escribirse, pero se tú el que maneje el lápiz para si no es así cambiarlo, al menos intentar retocarlo.

Lo que hagas y como te comportes puede ser lo que marque tu futuro y olvida la frase de "Eso jamás me pasará a mi" porque el jamás en esta vida es lo más impredecible que hay.

Cree en tí, piensa en los demás, lucha por tus ideales y por tu convicción de vida, pero jamás seas o pretendas demostrar lo que los demás quieran que seas. El pretender ser el más valiente o el más irresponsable de un grupo con ciertas actitudes o comportamientos no siempre se corresponde con la mejor definición de la palabra valor.

Un falso amigo dura lo que pueda durar su interés por tí, por tanto no pretendas ser más que nadie ni comportarte como más que nadie porque la vida es bella si la vives como tú deseas no como quieran los demás.

Tú joven, no dejes que la falta de madurez te lleve a demostrar que puedes ser mejor, sólo se tú mismo porque la vida está llena ya por si sola de peligros para que además estés buscándolos sin saber que las consecuencias nunca pueden ser como las puedas creer.

Las noches, las motos, los coches, las piscinas, el alcohol... son los mayores atractivos en vacaciones y fiestas, pero sus consecuencias son también las mayores armas de destrucción si no se usa la cabeza, y lo que más llena el hospital de parapléjicos de Tóledo.

No dejes que esas cosas proporcionadoras de una felicidad insustancial e inmediata intenten llenar un vacío en ti porque el llenar vacíos con ese tipo de cosas tan vanas pueden suponerte una carga de la que podría ser muy costoso deshacerse.

Vive, disfruta, intenta ser feliz y disfrutar de tu juventud y de las vacaciones, de las fiestas pero ten siempre la mente clara y no pierdas la línea de la claridad y de la realidad, pero ten una cosa muy clara y es que la madurez hace a la persona más espectador que autor de algunos comportamientos de la vida.

Un saludo amigos.
Raul Martinez.