En este nuevo año que ya ha comenzado, nunca permitas que las expectativas y opiniones de los demás afecten tus decisiones.
Es tu vida así pues haz siempre lo que más te importa y lo que te haga sentir vivo/a y feliz marcando tu camino, siendo constante y fiel a tus pensamientos y valores cada vez mas influenciados a lo que nos bombadean las redes.Y por ello con este nuevo comienzo de año escribo esta reflexión, que no deja de ser un pensamiento u opinión, sobre las redes, lo creible, lo influenciables que pueden ser y la clara idea de que lo mejor y mas sensato para una real mejoría mental social, es alejarse lo más posdible si cabe de ellas, y con ello espero ayude a generar alguna que otra interna reflexión sobre realmente quien o que influencia o control se puede tener de ellas y pensar seriamente quien cree controlar verdaderamente a quien....
En mi caso, aunque ya de por sí las uso bastante poco, tengo claro que seguiré reduciendo su uso a lo más básico y necesario y con ello mis publicaciones.
Y con esto no quiero decir que dejaré de publicar en mi Fb o aqui en mi blog, sino mas bien primaré mas la calidad que la cantidad y por ello reduciré la asiduidad para así también hacer como dice el refran: "lo poco gusta pero lo mucho cansa".
Lo que hago, escribo y hablo es mi experiencia de vida, me gusta y no me genera para nada un trauma ni complejo el compartirlo, sin filtros y de la forma más natural, porque esa es la base y naturaleza de ayudar y mas, siendo de manera gratuita y altruista, para así contar lo que hice y a mi me ayudó y que quizás, te pueda servir a ti ante la dureza de esos momentos de adversidad o paralización mental.
Un tiempo y labor, me reitero, altruista y gratuito, en la que jamás me han importado los números de likes, me gustas, seguidores, número de visitas, comentarios, entrevistas, charlas, el más por el simple más, ya que considero que no siempre dar más es mejor sin pensar en la calidad.
Solo y realmente me importa el que lo que con mi experiencia transmito, narro o escribo pueda ayudar y dar algo de luz a quien esté atravesando el inhóspito camino oscuro de la adversidad, por el que durante un tiempo me tocó transitar y logré, eso sí no exento de mucha lucha, paciencia, actitud y constancia, adaptarme y atravesar…
Pero creo que cada vez la sociedad está sumida y dependiente de un mundo irreal y virtual en el que se está inmerso cada vez mas. Su dependencia socialmente más normalizada en vez dedisfrutar mucho más del que es real, del que se puede oler, tocar y en el que se ve y siente lo que es la verdadera realidad.
Porque la verdad, me entristece cada vez más la dependencia social a la que se ha llegado de las redes, las mismas que cada cada vez aíslan más del trato humano, su credibilidad, y yo vengo de una época en la que no se necesitaban y las cosas se vivían y disfrutaban en la realidad del día a día, el trato y relación son los demás, y no que ahora las mismas parecen que son necesarias u obligadas para no ser raro, creer ser mejor y acercar, y sinceramente más que unir lo que hacen es aislar, separar aún más y sobre todo mucha más inseguridad en creer en sí mismo/a y personalidad.
Y me apena aún más cuando miro y solo ves gente aislada en su mundo virtual con el móvil a la espera de que lo entretenga un algoritmo que te muestra lo que crees que te va a gustar, que deberías comer, que es mejor vestir para sentirte bien y/o hasta hacerte creer que es lo que tienes que pensar..
Y todo eso hace que en su lugar, se empatice mucho menos y se pierda simplemente algo tan fácil, barato y sencillo como decirle al de al lado, al de enfrente, con quien estés o coincidas o vayas a estar, un simple buenos días, una mirada a los ojos con una sencilla sonrisa, quizás conversar de algo, o simplemente el entorno observar por si puedes ayudar y así del mismo disfrutar.
Porque aunque creas que eres tu el que controla internet, las redes, cada vez tengo más claro que son ellas las que nos utilizan, controlan e intentan hacernos más dependientes a nosotros, sobre todo a las nuevas generaciones que no han conocido otra cosa y cada vez, parece que les cuesta más diferenciar qué mundo es en verdad el real y el de verdad, lo que es postureo o naturalidad, lo dura y difícil que en verdad es la vida y no lo que se intenta mostrar.
Un tiempo y labor, me reitero, altruista y gratuito, en la que jamás me han importado los números de likes, me gustas, seguidores, número de visitas, comentarios, entrevistas, charlas, el más por el simple más, ya que considero que no siempre dar más es mejor sin pensar en la calidad.
Solo y realmente me importa el que lo que con mi experiencia transmito, narro o escribo pueda ayudar y dar algo de luz a quien esté atravesando el inhóspito camino oscuro de la adversidad, por el que durante un tiempo me tocó transitar y logré, eso sí no exento de mucha lucha, paciencia, actitud y constancia, adaptarme y atravesar…
Pero creo que cada vez la sociedad está sumida y dependiente de un mundo irreal y virtual en el que se está inmerso cada vez mas. Su dependencia socialmente más normalizada en vez dedisfrutar mucho más del que es real, del que se puede oler, tocar y en el que se ve y siente lo que es la verdadera realidad.
Porque la verdad, me entristece cada vez más la dependencia social a la que se ha llegado de las redes, las mismas que cada cada vez aíslan más del trato humano, su credibilidad, y yo vengo de una época en la que no se necesitaban y las cosas se vivían y disfrutaban en la realidad del día a día, el trato y relación son los demás, y no que ahora las mismas parecen que son necesarias u obligadas para no ser raro, creer ser mejor y acercar, y sinceramente más que unir lo que hacen es aislar, separar aún más y sobre todo mucha más inseguridad en creer en sí mismo/a y personalidad.
Y me apena aún más cuando miro y solo ves gente aislada en su mundo virtual con el móvil a la espera de que lo entretenga un algoritmo que te muestra lo que crees que te va a gustar, que deberías comer, que es mejor vestir para sentirte bien y/o hasta hacerte creer que es lo que tienes que pensar..
Y todo eso hace que en su lugar, se empatice mucho menos y se pierda simplemente algo tan fácil, barato y sencillo como decirle al de al lado, al de enfrente, con quien estés o coincidas o vayas a estar, un simple buenos días, una mirada a los ojos con una sencilla sonrisa, quizás conversar de algo, o simplemente el entorno observar por si puedes ayudar y así del mismo disfrutar.
Porque aunque creas que eres tu el que controla internet, las redes, cada vez tengo más claro que son ellas las que nos utilizan, controlan e intentan hacernos más dependientes a nosotros, sobre todo a las nuevas generaciones que no han conocido otra cosa y cada vez, parece que les cuesta más diferenciar qué mundo es en verdad el real y el de verdad, lo que es postureo o naturalidad, lo dura y difícil que en verdad es la vida y no lo que se intenta mostrar.
Como siempre e intentado ser lo menos dependiente de algo, aunque muchos me vean o tachen de raro, antiguo y/o vintage por no estar continuamente en la supuesta vida artificial e irrealidad de las redes, no dejaré que un algoritmo mi cabeza la quiera manejar, pero sí puedo asegurar que disfrutaré más de la gente que me sume, de momentos realeas que lo merezcan y de la realidad del día a día, porque solo ahí es donde la vida desarrollarás y podrás realmente ayudar y ser feliz solo con una simple pero sincera sonrisa o con un hola buenos días, qué tal…..
A darle vida a la vida y de la misma, enamorarse y con actitud, intentarla disfrutar.
A darle vida a la vida y de la misma, enamorarse y con actitud, intentarla disfrutar.
Un saludo.
Raúl Martínez.
