Uno mismo siempre será su mejor amigo, compañero y en quien mejor confiar, porque nadie mejor que tu mismo te conocerás.

Los supervivientes a las adversidades de la vida pueden ser capaces de decir las cosas mas profundas del modo mas sencillo.

La vida y la adversidad te enseñarán a no esperar nunca nada de nadie de lo que solo tu mismo por seguro te podrás aportar, como pueda ser la confianza, sabiduría, seguridad y sin duda alguna, la única y verdadera lealtad y amistad.

Los devenires de la vida nos mostrarán que solo tu eres y serás quien siempre a tu lado estará, solo aprende a escucharte, sé tu mejor amigo y compañero de batallas y confía en tu valor y tus posibilidades de lucharle a la vida y así avanzar.

Porque amigos, muchas veces la amistad la tenemos tan sobrevalorada que realmente no te dejas ver que son conocidos del largo o corto trayecto del camino de la vida y simplemente nada mas.

Aún así, siempre podremos disponer de todas las herramientas del mundo, pero si no tenemos ni la habilidad ni la confianza de que nosotros mismos sabremos darles uso, mal resultado se obtendrá, porque debemos ser lo suficientemente inteligentes como para asumir y comprender que no sabemos de todo, pero si tenemos la actitud y la aptitud de creer en si mismo, solo eso ya suplirá esa falta de conocimiento para transformarlo en ese aprendizaje que nos ayudará a dar vida, a ayudar, a crear y así mismo, a no dejar, por la vida, de avanzar.

Por ello, créate una visión de la vida que realmente deseas intentar alcanzar y luego trabaja incansablemente por hacerla realidad, ya que no importa cuánta experiencia tengas o cuánto creas que hayas vivido, porque siempre habrá algo nuevo que la vida te enseñara al margen de lo que la puedas mejorar, pero eso sí, solo una cosa debemos de tener siempre presente y recordar, y es que el tiempo pasa y no para nunca y con él nuestras fuerzas y energías al paso, desvaneciéndose irán.

Por eso es importante preocuparse por mejorar las limitaciones de nuestras propias capacidades, que por el hecho de que otros no puedan reconocer las mismas ni de lo que realmente podemos ser capaces de, con una buena actitud, alcanzar y lograr.

Y puede que seas la única persona que crea realmente en ti y en tus posibilidades, pero eso ya es por sí solo suficiente, porque solo se necesita un mínimo de confianza, un mínimo de luz interior para guiarte por la penumbra de los miedos a la que a veces la vida nos sucumbe, y si uno mismo puede ser su propia luz, también podrá ser su propio guía y, porque no, la de aquellos que sepan o quieran avanzar por las sendas que por la vida se irán quedando ya descubiertas y abiertas.

Pase lo que pase, espera siempre lo inesperado, y cuando sea posible, sé lo inesperado, porque amigos a veces, guste mas o menos, tienes que hacer lo que tienes que hacer, hasta que puedas hacer lo que realmente deseas y sueñas hacer..

Un saludo
Raúl Martínez.