Cuando a mí me pasó el accidente hace ya mas de 23 años, tenía 16 años, hacía kárate era casi cinturón marrón, el baloncesto no se me daba mal, y en el fútbol era algo más que bueno, pero al despertar en una habitación del Hospital de la Paz en Madrid, creía que mi vida de deportista, de disfrutar del deporte, había acabado.
Claro está, ni la época era la de ahora, no había tanta tecnología y ayudas, ni yo era el mismo, vamos apenas movía los brazos por ser tetraplégico.
Pero la vida avanza, las circunstancias avanzan y la ilusión se recupera cuando ves que realmente hay todo un mundo de deporte abierto a tus posibilidades de discapacitado, sólo que es complicado verte para cual de ellos eres mejor.
Yo practicaba el "roding" que no es mas que coger la silla e irte a "brazalear" darle a la silla como un loco (palabras inventadas por mi, jeje) por las calles durante un par de horas, con el consiguiente peligro que corres por la falta de accesibilidad de las aceras, ya que la práctica de cualquier otro deporte me era casi imposible por la falta de fuerza en las manos.
El desarrollar un deporte, por tonto y fácil que sea, en nuestra lesión diría que es casi obligatorio, no dejar el cuerpo parado y darle movimiento es lo que necesitamos si no queremos que nuestra maquinaria se vaya envagueciendo y empiece a fallarnos.
Que cuesta mucho, SÍ, es cierto, pero ¿qué no cuesta en esta vida? El sufrimiento, dolor, esfuerzo, nos será gratamente devuelto en nuestra salud si somos constantes y leales con nuestro cuerpo y nuestro deporte.
Hace poco que he conocido el mundo de la Handbike, y la verdad, creí que no iba a poder, y apunto estuve de dejarlo y abandonar, pero el volver a intentarlo, retarme a ver quien podía más, y ser constante, me ha llevado a introducirme en un mundo fantástico, da igual que seas parapléjico o tetrapléjico no muy alto, adaptaciones hay para todos, da igual la fuerza, la maña lo compensa todo pero sobre todo las ganas y la ilusión deben poder con todo obstáculo e impedimento.
Mi meta, poder llegar a competir en handbike. Al final seguro que las ganas podrán con mi falta de fuerza.
Todos podemos, de una manera u otra, pero podemos, no somos bichos raros, es gracioso como mucha gente te mira y, no sólo piensa sino que encima lo dice, "a ver para qué" como si el echo de ser discapacitado te impidiera hacer una vida normal acorde a tu situación, pero amigos, como dije en una entrada anterior, las barrearas sociales son infinitamente más numerosas que las físicas solo SÉ FUERTE, mira por ti y que no te detengan.
Estamos en verano, amigo discapacitado, utilízalo para dejar de echarte agua, estar bajo el aire acondicionado viendo la tele y chateando en el ordenador, y dale vida al cuerpo nutriéndolo de deporte, salud y buena forma física.
Que estás solo, y qué, si no empiezas jamás encontrarás gente como tú que se anime, que haga deporte y que luche por la vida, que a la vida bien llevada se le puede sacar mucho provecho.
Un saludo amigos.
Raul Martinez