Amiga "Soledad", durante mucho tiempo sabia y fiel compañera, y aún injustamente defenestrada por muchos, odiada por algunos y muy temida por otros, bajo mi experiencia amigos solo puedo deciros que, cuando dicha soledad es buscada, que no impuesta ni mucho menos obligada, es comprendida y muy bien sobrellevada en la que te sientes libre de cuándo y cómo visitarla, es un estado en el que encontrarse, reflexionar, en el que hablar con uno mismo/a y hallar verdadera paz, bienestar y saber reconocer la vital importancia de lo que es real y de lo que en la vida, verdaderamente vale la pena luchar.
Que no todo lo valioso es lo material o lo que continuamente nos intentan bombardear para autoconvencernos de lo feliz que nos hará, porque la verdadera y pura riqueza está en los detalles, valores y como no, saber transmitirlo, saber cuándo y cómo activarse y actuar, ayudar y sobre todo conocerse así mismo/a para saber que potenciar, en que mejorar o simplemente exprimir sabiamente el jugo de la vida que alimente tu fuerza mental, dar vida a la vida y de la misma manera de ella saber disfrutar.
Porque amigos, lo real te puede parecer engañosamente irreal, y lo vano y vacío de la irrealidad virtual, te puede hacer que creas que estás en un mundo real, pero no, la realidad es la que está dentro de tí, la que ves a través de la ventana en el despertar de cada mañana, y de lo que sientes al salir afuera con mente abierta para disfrutar de los bellos contrastes de colores, la diversidad de olores y del intercambio de conversaciones que hace que las personas nos sintamos humanos y no robots mentalmente enlatados.
La vida está afuera, así pues cuando te sientas aislado, en una soledad no buscada, sino más bien virtualmente dependientemente impuesta, cierra sesión, sal de ese mundo irreal para disfrutar y saber cuantas cosas bellas están sucediendo en el real, porque cuando la adversidad de la vida te busque, ten por seguro que te encontrará, y lo que no hayas vivido y compartido en la realidad, ya no lo podrás y si vives y te regala una segunda oportunidad, si no sabes aprovecharla te tocará verlo, vivirlo y llorarlo en el virtual.
Así pues amigos y amigas, desconectar de lo virtual y enchufaos a lo real.
A darle vida a la vida y de la misma, intentar disfrutar.
Un saludo amigos.
Raúl Martínez.
